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Lazos Rotos

Excesiva presencia de animales exóticos en las islas. Nota de prensa de la Asociación Tinerfeña de Amigos de la Naturaleza.

ATANLas serpientes viajan en Titsa. Un simpatizante nos envía la siguiente anécdota, referente a un curioso suceso vivido por el mismo en la estación de guaguas de Santa Cruz:

"Estaba en el andén esperando la guagua del Puerto de la Cruz, cuando observo a una chica con un recipiente de plástico transparente, de los que se suelen utilizar habitualmente para transportar animales. Lo curioso es que, en su interior, no había un hámster, un canario o un pez, sino una serpiente enrollada entre las cuatro paredes.

Una niña pequeña se acercó a curiosear, y la propietaria sacó al bicho de la caja, para enseñárselo. Luego, subió con el reptil en la línea 026, le enseñó la serpiente al conductor, que también estuvo curioseando, y se sentó en un sitio cualquiera.

Me llama la atención que no le dijeran nada, cuando a mí siempre me han prohibido subir con mi gato. Entiendo que haya personas alérgicas a los gatos, o que no soporten su presencia, pero si este reglamento se aplica para esos animales, es evidente que también debe de aplicarse a las serpientes"
.

La anécdota no deja de ser curiosa, pero en realidad es consecuencia de algo mucho más serio: el tráfico y libre circulación de especies exóticas por las islas. Hace unos meses escuchamos el caso de una gran serpiente encontrada en una lavadora en Tabaiba. Cada vez se ve a más personas paseando con iguanas, extraños roedores y demás animales que podrían provocar una catástrofe ecológica en las islas. En las tiendas de animales también se vende todo tipo de especies sin control aparente.

El 16 de Febrero de 2005, el Diario de Avisos publica la foto que acompañamos, en la que se ve un mono de Guinea atado, mediante una cadena, a unos trozos de uralita tirados en un solar. Una foto lamentable que muestra un doble desprecio por el medio ambiente: por un lado, el hecho de acumular materiales y basuras por cualquier sitio, y por otro, tener un animal semejante atado de mala manera.

Mono de Guinea atado con una cadena...

Foto del Diario de Avisos, 16 de Febrero de 2005


El Seprona indica en la misma nota que el propietario no tenía ninguna documentación del animal en cuestión. El mismo día, también en el Diario de Avisos, el director del Instituto Universitario de Enfermedades Tropicales y Salud Pública, Basilio Valladares, comenta que "La llegada de animales exóticos trae enfermedades tropicales a Canarias" y que nos estamos "saltando la barrera del mar por nuestros caprichos, trayendo animales que no pasan los controles de rigor necesarios"

Seguimos insistiendo en la necesidad de que se mejoren los controles en los puertos y aeropuertos de las islas. Ya tenemos bastantes especies invasoras, sobre todo de plantas, como para permitirnos el lujo de llenar las islas también de animales exóticos. Las autoridades responsables de este desastre no se preocupan en absoluto del problema, y, por si fuese poco, permiten que los parques zoológicos, como el "Loro Parque", importen cientos de especies de loros, pingüinos y hasta murciélagos, como los que se les escaparon hace unos meses, y que ahora se han convertido en un problema que el Cabildo quiere subsanar gastando una millonada (ver: aquí).

Fuente: Asociación Tinerfeña de Amigos de la Naturaleza (ATAN)
Enlace: Leer la nota de prensa en su fuente original aquí

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