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Lazos Rotos

Política para la dimisión, respuesta a Trenor.

Mientras Coalición Canaria enarbola la bandera de los independentistas de los años setenta y potencia el arrorró como himno y alimenta los Cantos Canarios como inyecciones para mantener un pueblo sumiso y adormitado, un militante, -por cierto presidente de la Autoridad Portuaria-, califica de "terroristas sociales" a los grupos que han alimentado el movimiento Asamblea por Tenerife que se opone a las obras faraónicas, al deterioro del medio ambiente, al alegato económico que se reparte entre cuatro gendarmes de la economía y que son los que arrasan las Islas y luego van a invertir a Marruecos o a Santo Domingo, lo que se sudó en el Archipiélago.

He dudado unos días si comentar esta triste noticia porque últimamente tengo presente al gran periodista del siglo XIX, Mariano José de Larra, cuando señalando una sepultura dijo "aquí yace media España, murió de la otra media"; y ya había media España que mataba a la otra media en múltiples críticas y manifestaciones. Por eso dudé en escribir de nuevo, para evitar convertirme en censor de nadie, ni herir susceptibilidades. Hasta hoy he preferido el silencio señor Suárez Trenor, pero creo necesario decirle que usted no me vuelve a insultar. El único terrorismo que hay aquí es el de los especuladores donde parece encontrarse usted, ya que de no ser así no arremetería contra un movimiento social que surge porque ustedes lo han propiciado, porque un nutridísimo grupo, heterogéneo, apolítico, socialmente capacitado, les ha dicho que esto se acabó.

Por supuesto que a estas gentes no les queda ni el consuelo del silencio en las cumbres cuidándole las cabras al señorito, como siempre sucedió, y por supuesto no pueden estar en esa primera división que usted anuncia, porque esa la ocupan ustedes y sus hijos y es para pocos y muy selectos. De ahí que quieran hacer un puerto en Granadilla donde se rompería el equilibrio ecológico a cambio de inmensas inversiones de las que se beneficiarían los propietarios de terrenos, los empresarios de la construcción, los propietarios de la inmensa cantidad de maquinaria pesada que ya está en parques sin rendir, porque con el exasperado desarrollo de la construcción turística y especulativa, se colapsaron los suelos urbanizables y se derrocharon parcelas y edificios que casi ya están vacíos por falta de estudios económicos y de desarrollo. Dentro de ese colapso y de la crisis turística, para qué ese puerto, para quién los beneficios. ¿Por qué insulta desde su arrogancia?

Seguramente esa Asamblea por Tenerife la componen asociaciones vecinales, agrupaciones de barrios que el urbanismo ha dejado marginados, señores y señoras mayores, gentes de mediana edad con presupuestos familiares desequilibrados por la emergente sociedad de la economía violenta que ustedes han propiciado; desocupados y desempleadas por jubilaciones forzosas; desalentados de mirar a donde ustedes apuntan; porque esa gente existe dentro de esa mitad de tinerfeños que no le aplauden; dentro de esa mitad de ciudadanos y ciudadanas críticas con el poder están, miles de estudiantes de primaria y secundaria también, miles de jóvenes de ambos sexos que han salido de las universidades y que esa sociedad progresista que ustedes han vendido en los últimos veinte años no les ha amparado. También hay poetas, artistas, escritores? Es la asamblea de los trabajadores y las trabajadoras, de las amas de casa que no son paseadas con bocadillos y refrescos para dar la vuelta a la isla en el período electoral; de los desasistidos; de los no escuchados; de los que no existen para el poder constituido; de los sin sueldo; de los sin destino; de los arrinconados; de los hijos e hijas de la clase media a la que no se les ha dado la oportunidad de desarrollarse y de demostrar que no son caldo de cultivo para el voto cuatrienal, sino que son el futuro de estas islas. Eso no es "terrorismo social".

El "terrorismo social" se desarrolla en reuniones de accionistas, en sedes de partido y en juntas de gobierno, ese es el "terrorismo social", que produce efectos demoledores en la sociedad que no entiende el porqué de tanto disparate. Ustedes ya son el pasado, son deshecho de una sociedad que han corrompido y la han descreído, a pesar de que sus hijos hayan tenido estudios en América y ocupen primeros puestos en Europa.

Si usted no tiene capacidad para recuperar la ilusión, ese es su problema, pero no me quite la mía, ni insulte a la sociedad que le paga el sueldo, ni crea que está en posesión de la verdad. La verdad no quiere fuerzas. Solo precisa de honestidad. Si tuviera respeto a sus hijos e incluso a su propia persona ya hubiese dimitido.

Adrián Alemán de Armas - La opinión de Tenerife

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