Alternativa Popular Canaria (APC) advierte del uso peligroso de plagicidas de modo descontrolado y la dejadez institucional.

La falta de controles administrativos puede repercutir seriamente en la salud de la ciudadanía. APC parte de la consideración de que en Canarias es mayor índice per cápita de consumo de plaguicidas agrícolas que en cualquier Comunidad Autónoma española. Y, como ha denunciado incluso la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agraria de la ULL, algunos de dichos productos son de alta toxicidad, tanto para el ser humano como para la fauna silvestre y acuícola y el medioambiente.

Para Ruyman Afonso, portavoz de la organización política de izquierdas “los residuos de productos de baja y media toxicidad en los alimentos pueden estar relacionados con la aparición de graves patologías en los consumidores. Del tal modo, se pueden asociar perfectamente el claro aumento de casos de cáncer y problemas cardiovasculares con la presencia en los alimentos de residuos de plaguicidas”.

Afonso afirma que los actuales controles son deficientes “tanto sobre la producción Canaria, como sobre los importados del exterior”. Y que “pese a la existencia en el archipiélago de dos Universidades, que varias veces han advertido de este peligro, y varios organismos de investigación agraria y alimentaria, se echa en falta un mayor número de controles por parte de los servicios de análisis, así como la regularidad de esos controles, para determinar los niveles de los plaguicidas en los alimentos consumidos por los canarios”.

El portavoz de Alternativa Popular Canaria apostilló que “esta negligencia institucional los convierte en verdaderos cómplices de un atentado contra la salud pública que los especialistas en el sector nos hemos cansado de denunciar, pero no por ello vamos a dejar de insistir en un tema tan delicado y que, tarde o temprano, ha de destapar irresponsabilidades: No precisamente la de los agricultores”.

Fuente: Alternativa Popular Canaria (APC)