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Lazos Rotos

El fin del prosparque.

Bitácoras canarias / La ruina de las islas canarias.- Fotos del Foro Ciudadano Contra la Incineración de Residuos. En la superior se ve el parque desde Las Mesas, en Abril de 2004, y en la inferior, en Abril de 2006.



En un canal local pusieron el lunes un programa sobre las obras del parque García Sanabria, en Santa Cruz de Tenerife. Entre los participantes en el mismo se encontraba Luis Cola, del cual he leído algunos textos y libros sobre la geografía de Santa Cruz, y Sebastián Delgado, con quien he ido a visitar varios edificios y monumentos históricos.

Junto al resto de los participantes en la tertulia, habían estado en las obras prácticamente terminadas del parque, y realizaron algunas tomas que reprodujeron, sobre las cuales también hicieron sus comentarios. Desde luego, escuchando la opinión de Sebastián Matías Delgado sobre las atrocidades cometidas en las obras, he comprobado lo que me temía desde que empezaron: se han cargado el Parque García Sanabria.

Antes de las obras, cuando estaban vallando el parque, pero todavía podía entrarse en él, cogí la cámara e hice todas las fotos que pude de todos los rincones que había visitado a lo largo de mi vida, así como otros que, tras las obras, iban a ser muy modificados.

Algo parecido hice hace unos años, cuando le dieron un "lavado de cara" al parque, asfaltando sus vías principales, y con otras actuaciones que no me parecieron nada acertadas. En aquella ocasión, redacté un largo artículo con todos los elementos que habían sido destruidos o modificados significativamente, pero parece que, esta vez, el destrozo ha sido definitivo.

Los tertulianos hacían comentarios como "lo único que queda es el trazado de los cuatro caminos principales" o "el aspecto del parque actual es el de una plaza, desolada".

Cuando visité la maqueta de la obra que expusieron al lado del parque infantil, me sorprendió el tratamiento que se le daba a algunos recintos: creación de un gran bar junto a la rambla (supongo que para los clientes del Mencey), un aparcamiento para guaguas, mucho césped y mucha tala. Esto es algo muy típico últimamente. Sustituir la vegetación tupida por asfalto. Los parques actuales son más plazas que parques.

Estas actuaciones suelen justificarse por favorecer la ventilación de la vegetación, darle más luz al recinto o incluso para evitar espacios cerrados que permitan el refugio de ladrones o similares. Desde luego, para evitar "emboscadas", nada mejor que talar el bosque…

El Foro Contra la Incineración, además de las fotos que publico al principio, ya publicó un comentario al respecto en abril (ver aquí). La escasez de la vegetación es lamentable. Esto también se puede ver desde la Clínica Parque y otros edificios anexos. Desde que empezaron, del parque han salido toneladas de madera, taladas dentro de esas vallas enormes que pusieron para que los ciudadanos no pudiesen ver las obras. Y esto no lo han hecho de casualidad. Creo que es la obra más hermética que ha habido jamás en Santa Cruz. Normalmente, se suele hacer pequeñas ventanas, para que los jubilados observen, o una valla semitransparente. En el parque, no se dejó espacio ni en las esquinas.

¿Qué es lo que nos oculta el Ayuntamiento de Zerolo detrás de esas obras? Porque una cosa es reponer la vegetación vieja y enferma o reformar los parterres y las infraestructuras básicas, pero otra cosa muy diferente es convertir el "solar" del parque en otro parque nuevo y distinto.

En cuanto a la reposición de la vegetación, esto es algo que se debería hacer de manera regular, y no esperar a que casi todos los árboles estén medio muertos. La sustitución progresiva de los ejemplares enfermos, es decir, un mantenimiento adecuado, y el cierre por partes del recinto para las obras, hubiesen permitido disfrutar del parque de manera continua.

En el "parcheo" anterior, sin ir más lejos, se cargaron las dos fuentes pequeñas que había sobre el reloj de flores, cuyo autor, Carlos Buigas, fue también el autor de la Fuente Monumental de Montjuich, en Barcelona. Las sustituyeron por un muro de cemento recubierto por baldosas, al más puro estilo mago – autoconstructor, y también eliminaron el juego de agua que tenían.

En la etapa entre las dos intervenciones, hubo una tala progresiva de cientos de árboles, que nunca se repusieron, entre los que destaca el árbol del pan (cuando era pequeño, llevé un fruto de éste hasta el centro de Europa, para enseñárselo a mis compañeros de clase), y el gran laurel de Indias que estaba al sur de la fuente central. Este último estoy convencido que lo quitaron para que cupiese bien el ’stand’ de Emmasa en las fiestas de mayo. Además, después de talarlo se podía ver perfectamente las aberraciones urbanísticas de Ifara y La Ninfa, desde la Calle del Pilar.

Cuando acaben las obras, las fiestas de Mayo tendrán un recinto ferial enorme y diáfano, mucho mayor que la cucaracha de Calatrava, y, desde luego, tendremos unas maravillosas vistas sobre el teatro de barriadas de casas apiñadas que rodean a Santa Cruz, como Barrio Nuevo, Los Campitos, Las Mimosas, Ifara, etc.

La integración de las aceras circundantes en el parque, eliminando el antiguo muro perimetral, es otra de las actuaciones desafortunadas, pues ese pequeño elemento, como también dijo Sebastián Matías Delgado en el programa, creaba un límite claro entre la ciudad y el parque, además de darle más intimidad y recogimiento al recinto. Al quitar ese muro, no se logra integrar al parque en la ciudad, sino más bien lo contrario.

Bueno, prefiero no hablar más de las barbaridades que habrán hecho en el parque, hasta que lo abran definitivamente. Lo primero que haré, entonces, es volver con la cámara a los mismos lugares, y rehacer las fotos, para comparar.

1 comentario

Me lo callo igual que tu -

¿Por qué no firma con su nombre el autor del articulo "El fin del prosparque"? Muy listo con su cámara de fotos y sus comentarios respetables... pero ¿por qué se esconde en el anonimato?