Insiste Bush en propuesta para legalizar tortura.
Medios alternativos / Prensa Latina.- El presidente estadounidense, George W. Bush, insistió hoy para que el Congreso apruebe su propuesta de ley sobre el tratamiento y juicio a supuestos terroristas, considerada por sus críticos como la legalización de la tortura. En su habitual mensaje radial de los sábados, el mandatario prometió que con esto estará más cerca el juicio a los autores de los ataques del 11 de septiembre.
Cuando el Congreso autorice los tribunales militares "que he propuesto, los hombres que nuestras agencias de inteligencia piensan que ayudaron a orquestar la muerte de tres mil estadounidenses el 11 de septiembre de 2001 podrán ser juzgados", argumentó Bush.
Analistas consideran que el Ejecutivo se refería a los 14 reos trasladados a la cárcel de Guantánamo, ocupada ilegalmente por Washington en el este de Cuba, procedentes de las prisiones secretas que mantiene la CIA en el mundo.
En este grupo de presuntos terroristas está Khaled Cheikh Mohammed, sindicado por las autoridades estadounidenses como el cerebro de la acción terrorista.
Las presiones de Bush ocurren después que la comisión para las Fuerzas Armadas del Senado derrotara este jueves la iniciativa presidencial y aprobara un proyecto alternativo.
En el plan del comité se conceden algunos derechos a los detenidos extranjeros sospechosos de terrorismo.
El texto fue aprobado por 15 a favor y nueve en contra, pese a una visita de Bush al Capitolio para presionar a favor de su idea.
La propuesta de Bush pretendía modificar las normas sobre el trato a los sospechosos de terrorismo, contempladas en la Convención de Ginebra, lo cual recibió un fuerte rechazo de importantes miembros republicanos.
Entre estos estuvieron los senadores John Warner, presidente del Comité, y John McCain.
La idea de Bush es legalizar la tortura durante los interrogatorios y proteger a los interrogadores estadounidenses de ser juzgados por crímenes de guerra.
El plan del gobernante que fue aprobado el miércoles por la Cámara no progresó.
Incluso, ese día una carta del ex secretario de Estado Colin Powell al senador republicano John McCain, un opositor a la idea, planteó que si se acogía esa iniciativa, "el mundo comenzará a dudar de la base moral de nuestra guerra contra el terrorismo".
La intervención de este sábado sobre el tema indica que el gobernante mantiene su promesa de "resistir cualquier texto legal que impida que ese programa se mantenga con la claridad legal necesaria", según adelantó esta semana.
Según analistas, este voto es una clara señal de la rebelión en el Congreso dominado por los republicanos sobre ese asunto polémico.
Este enfrentamiento, incluso, llevó al presidente a convocar una conferencia de prensa en La Casa Blanca, en la que dio muestra de su irritación con los senadores.
Tanto Warner como McCain son veteranos de guerra, y Powell, es un reconocido ex militar, por lo que Bush no los puede acusar fácilmente de favorecer a los terroristas.
De acuerdo con el Washington Post, lo que el presidente busca es apoyo para la tortura "para la desaparición de personas en cárceles secretas de la CIA, en donde se extrae información a personas" con métodos violentos.
Difícil que la Casa Blanca logre su objetivo, más aún cuando afloran serias contradicciones entre los civiles y los militares del Pentágono sobre el tema, según informa este sábado el diario The New York Times.
0 comentarios