El fiscal pide casi cinco años de carcél por una acción de Greenpeace contra la guerra de Irak.

El pasado 14 de marzo de 2003, cuando millones de personas en todo el mundo se estaba manifestando contra la inminente invasión de la guerra de Irak, el buque insignia de Greenpeace, Rainbow Warrior, se sumaba a estas protestas con una acción pacífica frente a la base militar de Rota.

Durante la protesta dos activistas, el estadounidense Lawrence Martin Turk y la española Mª Teresa Ambrós, fueron detenidos y horas más tarde, mientras se encontraba anclado frente a la bocana del puerto de la base militar de Rota, el Rainbow Warrior recibió una orden judicial pidiendo la retirada del barco. Sin embargo, antes de que la organización pudiera analizar el auto y tomar cualquier decisión, la policía judicial, acompañada por la Guardia Civil comenzó el abordaje del barco. Tras proceder a cortar el ancla del Rainbow Warrior, el buque fue remolcado hasta el puerto de Cádiz.

Tres miembros más de Greenpeace fueron detenidos durante el abordaje: el capitán del Rainbow, el argentino Daniel Rizzotti; el entonces coordinador español de las campañas de desarme de Greenpeace, Carlos Bravo, y el neozelandés Phillip Lloyd, miembro de la tripulación. Finalmente fueron puestos en libertad con cargos de resistencia a la autoridad y desobediencia.

A pesar de que la protesta fue totalmente pacífica, como todas las que realiza Greenpeace, el Ministerio Fiscal solicita cuatro años de prisión para Daniel Rizzotti por delitos de desobediencia, resistencia grave y lesiones; para Carlos Bravo y Phillip Walter Lloyd pide tres años de prisión para cada uno por delitos de resistencia grave y lesiones; y para los activistas Lawrence Martin Turk y Mª Teresa Ambrós, nueve meses de prisión para cada uno por delitos de desobediencia. En total casi 12 años de prisión.

Los delitos que se imputan son absolutamente falsos. Las penas desproporcionadas que solicita el Ministerio Fiscal sólo pueden explicarse en el contexto de los meses previos a la guerra de Irak, en un clima de recorte de libertades y restricciones a los derechos de expresión y manifestación.

El próximo 10 de mayo cinco activistas de Greenpeace España serán juzgados por haber protestado contra la gueera de Irak.

Si crees en la libertad de expresión, si también te manifestate contra la guerra de Irak, si crees que nadie debería ser condenado por ejercer su derecho a manifestarse contra la guerra, te pedimos tu apoyo: ¡actúa!

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Fuente: Greenpeace España
Enlace: Prensa Alternativa (Icod de los Vinos)