Blogia
Lazos Rotos

La Universidad de La Laguna se posiciona contra la incineradora de Arico.

A propuesta del Sindicato de Estudiantes Canarios, el Claustro de la Universidad de La Laguna ha aprobado, el pasado 21 de abril, una resolución sobre rechazo a la incineración y por el fomento de políticas sostenibles en materia de gestión de residuos. El resultado de la votación fue de 90 sí, 20 no y 5 abstenciones.

RESOLUCIÓN: La universidad de La Laguna, como institución pública, atiende a la siguiente exposición de motivos:

A partir del cierre de la gran cantidad de vertederos existentes en la isla de Tenerife, la acumulación de residuos se concentró en un solo lugar: el municipio de Arico, tal y como planteó en su momento el PIRS (Plan Insular de Residuos Sólidos)

Esto sucedió hace más de veinte años y provocó gran rechazo entre la población local. Desde entonces, ésta ha venido sufriendo las consecuencias de tal instalación: malos olores, proliferación de ratas y líquidos contaminantes (lixiviados), crecimiento desproporcionado del vertedero y, en general, molestias de todo tipo.

Ante el incremento desmesurado de residuos en la isla, el Cabildo tinerfeño propone como “solución” la instalación de una planta de incineración en algún lugar del complejo medioambiental de Arico. A pesar de que desde nuestras administraciones oímos hablar continuamente de políticas sostenibles y respetuosas con el medio ambiente, vemos una vez más que se trata de pura demagogia.

La incineración es la forma más irracional, insostenible y costosa para la salud humana y el medio ambiente de gestionar los residuos. Apostar por ella sólo se justifica desde el rechazo de la efectividad de los mecanismos de reciclaje, reutilización y reducción de los residuos.

La incineración no hace desaparecer la basura ni su toxicidad ya que muchas de las sustancias tóxicas presentes en los residuos se transforman en formas más tóxicas que las originales, pues emite gases, cenizas y otras sustancias resultantes de la misma, entre las que destacan las dioxinas (cuya relación con el cáncer y otras enfermedades ha quedado demostrada) Su gravedad se refleja en hechos como la prohibición de su implantación en varios países y el rechazo basado en múltiples informes científicos que alertan sobre los perjuicios que acarrea para los seres humanos y el medio ambiente.

La construcción de una planta de incineración solo beneficiaría a las empresas privadas (tanto en su fase de construcción como en la de su explotación) y perjudicará a los habitantes del sur de Tenerife, en especial a los habitantes de Arico y su entorno medioambiental. Por todo ello:

  • El Claustro de la ULL se posiciona en contra de la instalación de una planta incineradora en el municipio de Arico y apuesta por una forma de gestionar los residuos responsable y respetuosa con el medio ambiente y las personas.



  • Fuente: Foro contra la Incineración

    0 comentarios