Aviones de la CIA usaron territorio español.
Medios alternativos / Juventud Rebelde.- Lo confirma investigación de la Unión Europea sobre los vuelos secretos con prisioneros. El informe del eurodiputado italiano Claudio Fava, ponente de la comisión temporal del Parlamento Europeo sobre los vuelos de la CIA, avala las denuncias del uso de territorio español en el trasiego de prisioneros, dice PL.
Un anexo al informe central evidencia que un Boeing 737 voló el 23 de enero de 2004 de Palma de Mallorca a Skopje y desde allí se dirigió a Bagdad y Kabul, coincidiendo con la fecha en que el ciudadano alemán Khaled el Masri, salió de Macedonia, donde había sido secuestrado por la CIA con el objetivo de interrogarlo por sospechas de vínculos terroristas. El dato se conocía, pero no era público hasta ahora el trayecto completo del avión: inició su viaje en Washington el 16 de enero, y pasó primero por Irlanda, Chipre y Rabat.
Luego, supuestamente ya con el secuestrado a bordo, el avión hizo la ruta Skopje-Bagdad-Timisoara (Rumania), desde donde volvió a hacer escala en Palma de Mallorca, el 26 de enero, antes de regresar a Washington, 12 días después de haber salido.
El informe avala la sospecha del Consejo de Europa de que la isla española era utilizada como plataforma de planeamiento y descanso de los agentes de la CIA, antes y después de acometer sus operaciones, lo cual es plenamente coherente con el trayecto mencionado.
Una investigación a posteriori de la Guardia Civil, en el aeropuerto de Son Sant Joan, en la capital de las Baleares, reveló que la totalidad de los tripulantes tenía pasaporte diplomático para encubrir el trasiego de prisioneros y secuestrados. Aunque el Boeing 737 figura a nombre de empresas privadas y ha cambiado varias veces de matrícula, su vinculación con la administración de Estados Unidos no admite dudas: tenía permiso para aterrizar en bases militares estadounidenses en todo el mundo.
Entre 2002 y 2005, hizo tres viajes a Guantánamo, siete a Kabul y diez a Bagdad, entre otros destinos, indica el informe ampliamente divulgado por los medios de comunicación españoles.
La escala rumana, durante el viaje en el que supuestamente fue secuestrado El Masri, resulta especialmente significativa, ya que el Consejo de Europa ha expresado su convicción de que este país y Polonia albergaron prisiones clandestinas de la CIA.
El informe del Parlamento Europeo señala que el Boeing 737 aterrizó una vez en Polonia y dos en Rumania procedente de Afganistán. Concretamente, en septiembre de 2003 voló a Szymany, un aeropuerto remoto y poco usado del noreste de Polonia que, sin embargo, se encuentra muy próximo a unas instalaciones del servicio secreto polaco.
Desde allí, según los datos del anexo al informe realizado por Eurocontrol, hizo la siguiente ruta: Rumania, Rabat (Marruecos) y la Base Naval de Guantánamo. Están registradas 125 escalas en territorio español.
El caso de El Masri no es el único que evidencia que este tipo de vuelos se empleaban para algo más que para el apoyo logístico de los agentes de la CIA, como alegó la administración de Bush al Consejo de Europa.
El ministro del Exterior Miguel Ángel Moratinos, comparecerá ante el Congreso con nuevos datos sobre el caso, según anunció, pero de hecho rechaza cualquier vinculación de España con el trasiego de prisioneros hecho por Estados Unidos.
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