Declaraciones contradictorias, donde primero se desaconseja la utilización -por parte de las autoridades sanitarias-, del agua del grifo y después se afirma -por parte de las mismas autoridades- que las anteriores declaraciones fueron alarmistas...

Salud y sociedad / Canarias Insurgente.- Bajo el titular 'Sanidad desaconseja el uso de agua en 11 pueblos tinerfeños', que aparecía ayer en la portada de 'Diario de Avisos' se podía leer la nota informativa de la Dirección General de Salud Pública, dependiente de la Consejería de Sanidad, donde se "desaconcejaba" la ingestión y/o utilización del agua del grifo: "El elevado nivel de flúor en el servicio corriente de agua desaconseja el uso del líquido elemento en once municipios tinerfeños que, total o parcialmente, sufren en la actualidad niveles de esta sustancia por encima de las recomendables."

Los municipios afectados por las medidas son: Adeje, La Matanza, La Victoria, Santa Úrsula, San Juan de la Rambla, Icod de los Vinos, Garachico, La Guancha, Bunavista del Norte, Los Silos y El Tanque.

En la misma noticia se podía leer: "...la normativa vigente, muy exigente con los parámetros de afección química en el agua de consumo humano, sitúa entre 1,5 y 4 miligramos por litro la franja en la cual está desaconsejado el consumo de agua por niños de hasta ocho años, debido al riesgo de, en el caso de un consumo prolongado, sufrir fluorosis dental, un mal ya conocido en el pasado en varios pueblos de Tenerife, y cuyo síntoma característico consiste en la aparición de manchas en la dentadura del niño. A partir de cuatro miligramos por litro, la restricción afectaría a toda la población, debido al riesgo de, otra vez tras un uso permanente, padecer fluorosis esquelética, una dolencia de más gravedad."

Sin embargo hoy en el mismo periódico el responsable de Aguas y Agricultura del Cabildo y vicepresidente del Consejo Insular de Aguas, José Joaquín Bethencourt declara: 'El Cabildo afirma que no hay motivo de alarma por la calidad del agua corriente', donde suaviza su advertencia de ayer.

Ante este tipo de declaraciones contradictorias, donde primero se desaconseja la utilización -por parte de las autoridades sanitarias-, del agua del grifo y después se afirma -por parte de las mismas autoridades- que las anteriores declaraciones fueron alarmistas, sólo nos queda sacar una conclusión: el evidente y preocupante divorcio que existe entre administraciones, ya sean estas locales, insulares o autonómicas.

Ante este intercambio de contradictorias notas de prensa, desde Canarias Insurgente advertimos e informamos que:

- Cuando las concentraciones de fluor superan el valor máximo aceptado se produce el veteado en los dientes de aquellas personas que han consumido esta agua en los primeros años de su vida (hasta los 8 años) o sea cuando los dientes están en formación.

- Cuando el contenido de fluor en las aguas supera las 3 ppm puede aparecer en las personas que beben esta agua durante algunos años una grave afección en los huesos llamada osteoporosis, daños en riñones, huesos y músculo.

- En los casos de fluorosis, enfermedad que se da especialmente por sobredosis; se pueden producir: moteado del esmalte, aumento de la masa ósea con calcificaciones ligamentarias, especialmente en la columna vertebral (espondilitis deformante)...

Los ciudadanos exigimos a las autoridades competentes, se hagan públicos los resultados análiticos del agua que ingerimos, así como los sistemas que se utilizan -electrólisis, etc...- para revertir o minimizar su toxicidad hasta parametros óptimos de ingestión.