Reactivación magmática en el noroeste de la Isla. Los técnicos prevén que continúen los seísmos en los próximos meses

Emilio Carreño, jefe de sismografía del IGN, informó ayer de que "lo más posible es que esta cadena de pequeños seísmos de origen volcánico permanezca en el noroeste de Tenerife durante un tiempo indeterminado, que pueden ser meses o incluso varios años". Carreño manifestó que "habrá periodos de cierta calma, pero los pequeños temblores volverán, hasta que la situación se tranquilice o no", y confirmó que "hemos registrado muchísimos movimientos desde el 22 de abril, pero no superan el centenar los que han sido perfectamente localizados y poseen una cierta magnitud".

En los últimos dos días no se han producido seísmos de más de un grado en la escala Richter, pero la pasada semana se contabilizaron más de 40 y por primera vez se concentraron en una zona concreta de Tenerife: los alrededores de Pico Viejo, un cráter que se encuentra justo al lado del edificio principal del Teide y bastante alejado de las poblaciones de los altos de la Isla.

Los científicos insisten en precisar que Tenerife atraviesa por una anormalidad previsible ante la evidente naturaleza volcánica de las Islas. El Archipiélago ha venido registrando infinidad de erupciones -violentas y no tan violentas- a lo largo de su historia, con una periodicidad relativa de cerca de 45 años entre una y otra desde que se poseen referencias escritas, a partir del siglo XV. La última fue en 1971 en el volcán Teneguía, de La Palma. Tenerife tiene el vulcanismo más complejo de Canarias (presenta todo tipo de volcanes, lavas y erupciones) y, por consiguiente, es la Isla más imprevisible.

Fuente: La Opinión de Tenerife