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Lazos Rotos

PP y CC 'entierran' la propuesta para proteger la costa de Granadilla.

El Parlamento de Canarias rechazó este jueves, con los votos de los grupos de Coalición Canaria (CC) y Partido Popular (PP), la tramitación de la iniciativa legislativa popular a favor de la declaración de la Reserva Natural Especial del Litoral Noroeste de Granadilla (Tenerife), propuesta presentada con el respaldo de más de 50.000 ciudadanos para evitar la construcción de un puerto en el municipio del sur tinerfeño.

Nacionalistas y populares avalaron la posición del Gobierno de Canarias, que expresó su disconformidad al considerar que la documentación que contiene la proposición no de ley para proteger el litoral de Granadilla de Abona no justifica la declaración de un nuevo espacio natural protegido.

La iniciativa pedía que se declarase reserva especial la zona de litoral comprendida entre la playa del Río y la playa de la Jaquita, en el término municipal de Granadilla, incluyendo el Monumento Natural de Montaña Pelada y excluyendo corespondiente al tramo de la central eléctrica de Unelco-Endesa en el sur tinerfeño. El portavoz de la comisión promotora de la iniciativa popular y ex alcalde de Vilaflor en representación del Partido Socialista Canario (PSC-PSOE), José Luis Fumero, relacionó el rechazo con la construcción del "macropuerto" industrial en la costa de Granadilla, proyecto cuajado de "falsedades, secretismos, manipulaciones y atentados, en suma, al normal desenvolvimiento democrático".

Además, Fumero recordó que la iniciativa popular (disponible en el apartado Documentos) contó con el respaldo de 53.319 firmas y recordó que es continuación de otras presentadas de similar naturaleza como las de El Rincón, Veneguera o el Malpaís de Güímar. En su opinión, la proposición de ley es conveniente y oportuna para evitar "la destrucción inútil e irreversible" de una zona del sur de Tenerife que guarda importantes valores naturales y se encuentra en excelente estado de conservación (ver apartado Zona de Debate).

Además, el representante ciudadano, líder en el rechazo al trazado del tendido eléctrico de alta tensión para el sur de la Isla (ver reportaje titulado El 'efecto Vilaflor' todavía alumbra Tenerife) se mostró convencido de que esta iniciativa es apoyada por la mayoría de la comunidad científica canaria y recordó la manifestación popular que recorrió las calles de la capital tinerfeña para pedir la protección del litoral de Granadilla. Alrededor de 100.000 personas, 20.000 ciudadanos según el Gobierno autónomo, se concentraron a finales del pasado año para encaminar el modelo de desarrollo de Canarias por una vía menos "insostenible y depredadora de los recursos naturales".

Igualmente, Fumero subrayó la gravedad del informe reconocido el pasado jueves por el consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Augusto Lorenzo, al argumentar que, pese a que el responsable autonómico dijo que el texto avalaba las tesis del Gobierno para no aceptar la tramitación de la iniciativa, el documento concluye que la franja costera del litoral noreste de Granadilla desempeña un papel destacado en la conservación de la biodiversidad y particularmente en relación con algunas especies catalogadas. En cualquier caso, el portavoz ciudadano consideró que más allá de los valores ambientales el Parlamento debía aceptar la tramitación de esta iniciativa por respeto a los principios democráticos más elementales y que su negativa supondrá tanto como negar la posibilidad de recoger y canalizar "un sentimiento democrático profundo que expresó la ciudadanía", con la consiguiente fractura social entre políticos y ciudadanos.

Se ha pasado de listo. Por su parte, el diputado del grupo Mixto Juan Antonio Betancor apoyó a la toma en consideración de la iniciativa y el parlamentario socialista Santiago Pérez destacó que detrás de la iniciativa se encuentra una parte muy importante del pueblo de Tenerife.

A juicio del representante de la oposición, el Gobierno "se ha pasado de listo" en la formulación de este acuerdo e intentó solapar este debate al situarlo al final del orden del día de la sesión plenaria. Pérez señaló que su grupo tiene una actitud comprometida pero abierta en cuestiones de desarrollo y medio ambiente y afirmó que el Ejecutivo no ha explicado para qué, qué dimensión y qué impacto tendrá el puerto de Granadilla, al tiempo que se mostró convencido de que en esta zona hay valores más que sobrados para declararla como protegida.

Por ello, desde el PSC se pidió a CC y PP como fuerzas integrantes del Gobierno que reconsideraran su postura. Tras lee el informe de la Viceconsejería de Medio Ambiente, Pérez acusó a Lorenzo de ocultar el texto, lo que debe tener repercusiones políticas.

Mientras, Cristina Tavío, del grupo Popular, indicó que la iniciativa popular pretende impedir la construcción del puerto de Granadilla y subrayó que el estudio del informe de la Viceconsejería le confirma que se trata de una zona que no requiere una protección especial y choca con proyectos importantes para la Isla. Entre ellos, la parlamentaria conservadora citó la ampliación de la autopista, el nuevo puerto de Granadilla, el proyecto de ampliación de mejora de instalaciones de producción de energía eólica y de otras de energía renovables, así como el proyecto de instalar la planta de gasificación y el proyecto de suficiencia de energía eléctrica del sur de Tenerife.

Por su parte, Flora Marrero, del grupo de Coalición Canaria, recordó que el Parlamento es el órgano representativo de la soberanía popular, pidió respeto para la decisión que se adopte y subrayó que la normativa medioambiental de Canarias es la más amplia del Estado. Tras explicar que la decisión adoptada no resultó fácil, la diputada nacionalista señaló que hay informes técnicos que justifican el rechazo a la toma en consideración de la iniciativa que es imprecisa en su contenido y choca con obras importantes para la Isla como el desarrollo energético.

Fuente: Canarias Ahora

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