Blogia
Lazos Rotos

Sahara Occidental: Autonomía con cadenas coloniales.

Medios alternativos / Cuba Trabajadres Digital.- Juan Dufflar Amel. Las posiciones de fuerza mantenidas por la monarquía marroquí en el prolongado conflicto para la descolonización del Sahara Occidental continúan obstaculizando este proceso y transitando por el rumbo inverso de la historia. Dieciséis años después de haber proclamado de conjunto con el Frente POLISARIO un cese el fuego en su cruenta guerra, como primer elemento del Plan de Arreglo de Naciones Unidas acatado por ambas partes en septiembre de 1991, y de frenar durante todo ese tiempo su implementación, el gobierno de Rabat se aparece ahora con un engendro de autonomía para el Sahara Occidental, que de hecho mantendrá su status de última colonia en el norte de África.

Según lo indicado por Jelli Henna Uld Errachd, presidente del denominado Consejo Consultivo Real para Asuntos Saharianos (CORCAS), organismo designado por el Rey Mohamed VI en marzo pasado, el gobierno de Rabat propondrá a la ONU el próximo mes de octubre un proyecto de “amplia autonomía” para ese territorio “en el marco de la soberanía marroquí”.

El entuerto diversionista de la monarquía alauita ni siquiera es original, pues el concepto de autonomía para la ex colonia española ya había sido consignado en la Resolución 1495 del Consejo de Seguridad de la ONU, que aprobó en el 2003 el “Plan de Paz para la autodeterminación del pueblo del Sahara Occidental”, (Plan Baker II), ante el continuado fracaso de hacer valer los compromisos adquiridos por Marruecos con el FPOLISARIO, contenidos en el armisticio.

Plan que establece un período de autonomía en el Sahara Occidental dentro de Marruecos entre cuatro y cinco años, tras el cual se celebraría un Referéndum de Autodeterminación mediante el cual el pueblo saharauí decidiría el estatuto final de ese territorio: país independiente o provincia integrada a Marruecos.

No sin reticencias y reservas, el Frente POLISARIO manifestó su voluntad, en aras de una solución de paz al conflicto colonial, de considerar y respetar el Plan Baker II, sin dejación del firmado con Rabat en 1991, aunque desde un principio la monarquía los rechazó a ambos rotundamente.

Los constantes obstáculos interpuestos por Rabat a la Misión de las Naciones Unidas para un Referéndum en el Sahara Occidental (MINURSO), encargada de la realización del plebiscito popular, y la negativa marroquí a su celebración, mantienen estancado el proceso descolonizador.

Aunque el “novedoso” proyecto no ha sido aún anunciado en todos sus detalles, cabe preguntarse ¿qué tipo de autonomía puede ofrecerle el Reino de Marruecos al pueblo saharauí cuando ocupa desde 1975 sus históricos territorios, manteniendo en ellos una permanente represión a sus ansias de libertad y autodeterminación?

Rabat pretende una autonomía que de seguro cercenará la autoridad saharauí en sus competencias ejecutivas cuando la monarquía estime que constituyen una tentativa secesionista.

La respuesta del pueblo saharauí y su representante el Frente POLISARIO al “cocinado marroquí” no se ha hecho esperar y han rechazado enérgicamente cualquier maniobra dilatoria a la materialización del Programa de Paz de Naciones Unidas, a la vez que han reafirmado su derecho a la libre autodeterminan establecidos también por las resoluciones del Consejo de Seguridad.

Ni población autóctona de la República Árabe Saharaui Democrática, proclamada en febrero de 1976 en los territorios liberados, ni el FPOLISARIO, su organización política, ni sus fuerzas armadas reconocen autoridad alguna a los “notables” del CORCAS al servicio de la monarquía marroquí para decidir sobre sus destinos como nación.

0 comentarios