El Parlamento canario respalda el respeto a los derechos humanos en el Sáhara.

El pleno del Parlamento de Canarias acordó hoy pedir que se respeten los derechos humanos de la población del Sahara Occidental, al tiempo que reiteró el derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación, si bien el PP se opuso al acuerdo por constituir "una farsa" de los socialistas.

Esta iniciativa, que fue planteada por el PSOE y enmendada por CC, surge tras las manifestaciones independentistas y la represión de finales de mayo que denunciaron organizaciones saharauis en el territorio ocupado, si bien en la propuesta se refieren estos hechos como "sucesos" y "acontecimientos recientes".

Los socialistas habían limitado su propuesta a instar al Gobierno de Canarias y al Gobierno central, a que realicen gestiones ante Marruecos, la UE y las organizaciones internacionales para que se garanticen los derechos humanos de la población saharaui.

Pero aceptaron añadir una propuesta adicional a instancias de Coalición Canaria en la que se apoya una solución "urgente, justa y definitiva" en el marco de la ONU y de la legalidad internacional "para resolver el drama humanitario" del pueblo saharaui a través del ejercicio de su derecho a la autodeterminación.

El portavoz del PP, Jorge Rodríguez, justificó el voto en contra de su grupo en que el acuerdo constituye "una farsa" del PSOE para "escenificar que apoyan al pueblo saharaui", a pesar de que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero "los ha abandonado a su suerte".

Jorge Rodríguez retó a los socialistas a que trasladen ese acuerdo al pueblo saharaui, "a ver qué efecto les produce" después del abandono que atribuyó al Gobierno español.

"A raíz de los disturbios, políticos y periodistas españoles han querido visitar el territorio", recordó Jorge Rodríguez, pero el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, se muestra "incapaz de respaldar a las delegaciones", destacó.

Moratinos, "lejos de mantener una posición de dignidad política, se adhiere a la posición crítica de Rabat y abandona cualquier atisbo de defensa del pueblo saharaui", afirmó Jorge Rodríguez, quien acusó al Gobierno español de echarse en brazos de Marruecos "hasta posiciones que rozan la indignidad".

"Creemos en las buenas relaciones con Marruecos, pero otra cosa es el sometimiento y el trágala", dijo y concluyó: "No estamos amnésicos ni vamos a apoyar una farsa que les permita escenificar que apoyan al pueblo saharaui mientras impiden que les visiten".

El diputado socialista Santiago Pérez habló de "graves acontecimientos" en ciudades saharauis y dijo que las autoridades marroquíes obstaculizan el ejercicio de derechos fundamentales de la población.

Pérez dijo que no se trata ahora de defender los intereses estratégicos del archipiélago canario, sino los derechos humanos de la población, al tiempo que rechazó que se realicen "análisis simplistas" sobre la situación en el Sahara.

José Miguel Barragán, de Coalición Canaria, defendió un compromiso más activo con las resoluciones de la ONU y con el derecho del pueblo saharaui a decidir su futuro en un referéndum.

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