Sospechoso el silencio de las administraciones públicas, sobre las turbinas.

Asociaciones ciudadanas / Tagororachinech.- El Colectivo Tagoror Achinech sospecha de la existencia de una confabulación, de las instituciones públicas para permitir que Unelco instale las turbinas, sin ninguna oposición y saltándose todas las normativas legales existentes, ya que ninguna administración pública ha tenido la decencia, si alguna vez la han tenido, de responder alas denuncias interpuestas por este colectivo, ante tal fechoría.

Al director de la Agencia de protección del medio Urbano y Natural, calificado como un matón de patio de colegio, por Tagoror Achinech, por su cobardía de no actuar ante ninguna infraestructura titular de una multinacional, sino ante las viviendas ilegales de los trabajadores, dejando impune las mansiones de otros, ni mucho menos actuar contra las turbinas, ni siquiera responder a los escritos que se le han remitido, máxime cuando se le ha solicitado que informe de sus actuaciones si las ha llevado a cabo.

La Consejería de Industria, guarda silencio, sin responder a las más de doscientas alegaciones que se presentaron durante la exposición pública de la solicitud de licencia en ese organismo, y mediante comunicado de prensa se entera la población de que se ha otorgado autorización para tal atentado, sin que haya comunicado al colectivo, nada aunque se le ha requerido copia de dicha autorización.

El Ayuntamiento de Guía de Isora, explica lo inexplicable, diciendo que tiene que conceder la licencia, porque se la imponen administraciones superiores, convirtiéndose en lacayo del Cabildo y del Gobierno de Canarias, pues bien que podía haberse negado, o aplazar la concesión de la licencia, hasta que las de la Resolución de la Consejería de Medio Ambiente fuese firme, sabedores que esa resolución ha sido recurrida por Tagoror Achinech y, sabedores que dicha consejería confunde lo del Medio Ambiente con la Mitad del Ambiente.

Pero en este complot se suma el Consejero de Planificación del Cabildo Insular de Tenerife, José Manuel Bermúdez Esparza, a quien se le comunicó el pasado día 27 de febrero de 2006, mediante escrito del colectivo, solicitándoles la paralización de las obras de instalación de las turbinas en Chío, porque violan lo especificado el P.I.O.T, del cual es el responsable directo, ya que el propio Plan Insular de Ordenación del Territorio, prohíbe en la Áreas de Protección Económica 3 (lugar donde se ubican las turbinas) este tipo de instalaciones y, que existen informes internos del Cabildo que solicitan LA INADMISIÓN de estas instalaciones, sin que hasta el momento haya hecho caso al mencionado escrito.

El comportamiento del señor Bermúdez, ha sido el mismo que de todos los responsables de las distintas administraciones, la sumisión y rendirle pleitesía a Unelco porque perro no come carne de perro.

El trámite judicial sobre la concesión de licencias para que Unelco haya hecho lo que le ha dado la gana ha comenzado, pero sería interesante que algún fiscal o juez, emprendiese una investigación de oficio, para averiguar el por qué se ha permitido esta tropelía, por qué se continúa con el silencio administrativo, por qué no ha sido capaces de dar explicaciones al respecto. Muchos por qué dudosos y sospechosos, siendo interesante que se aclarasen.

Chío a, 5 abril 2006