Juegos de guerra.
Medios alternativos / Cubadebate.- Roberto García Hernández . Las informaciones que han trascendido acerca del informe de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) sobre el desarrollo del programa nuclear de Irán, no son nada positivas y echan leña al fuego de la hoguera imperial de la guerra. El reporte de la entidad de las Naciones Unidas hace más fácil a la administración Bush el camino hacia la confrontación.
Y en medio este debate, se calienta en Estados Unidos la posibilidad de una acción militar contra Irán. Han aparecido informaciones en las últimas semanas acerca de la realización de ejercicios o juegos de guerra con la participación del Departamento de Defensa (Pentágono), mandos militares, en especial el Comando Central, así como otras agencias, incluyendo los servicios de inteligencia de ese país, en los que se han jugado dinámicas sobre una eventual agresión norteamericana contra Irán.
Por definición, los juegos de guerra en ocasiones se realizan durante varias semanas e incluyen la participación real de tropas o medios aéreos y navales, contra otras unidades que simulan las acciones del adversario; otros son simulaciones en computadoras o simples procesos de pensamiento y discusión en los que un grupo de personas, en papeles de funcionarios de primer nivel, tratan de encontrar soluciones a una crisis hipotética o basada en la realidad.
Entre el 27 de marzo y el 6 de abril de 2006, se desarrolló uno de estos juegos peligrosos en los que se ensayaron situaciones de la vida real. Participaron más de 300 funcionarios del Departamento de Estado, la Junta de Jefes de Estado Mayor, el FBI, la CIA y el Comando Central este último es el mando militar que incluye a Irán en su Área de Responsabilidad.
Otro ensayo similar está programado para realizarse el 18 de julio de este año, y estará dedicado a discutir las opciones para un eventual ataque contra Irán. El ejercicio se realizará en el Centro Nacional de Juegos Estratégicos, de la Universidad de Defensa Nacional, ubicada en el área de Washington DC. Participarán altos funcionarios civiles y militares, y por primera vez en un ejercicio que tiene a Irán en su objetivo central, estarán presentes miembros del Congreso norteamericano.
Un artículo publicado por el diario 'USA Today' el 18 de abril, señalaba que este ejercicio es un ejemplo de cómo las operaciones rutinarias están ayudando a Estados Unidos a prepararse para una probable confrontación con Irán.
A mediados de abril, medios de prensa de Gran Bretaña revelaron que altos oficiales de ese país habían participado en julio de 2004, en Fort Belvoir, Virginia, en un juego militar con sus homólogos norteamericanos en el cual se ensayó una invasión contra Irán.
Los halcones de la administración están poniendo sus esperanzas en un probable cambio de régimen en Irán, mediante acciones encubiertas preferiblemente, pero si esto falla, lo harían mediante el uso de la fuerza, advierte Newsweek. La publicación añade que en altas esferas de la administración Bush se está circulando un borrador de un memorándum que sintetiza la idea antes mencionada: el derrocamiento forzoso del actual gobierno iraní, la rápida instalación de un gobierno pronorteamericano que asegure su compromiso de no continuar las investigaciones nucleares, y posteriormente retirar las fuerzas estadounidenses. Esta idea macabra ha preocupado a los principales jefes militares estadounidenses.
Khalid Al Rodnam, un experto en temas iraníes en el Centro de Estudios Estratégicos Internacionales (CSIS) considera que actividades similares a las anteriormente explicadas pueden tener consecuencias en el mundo real, ya que Irán podría interpretarlas como evidencias de que Estados Unidos planifica atacarlo.
En una reciente intervención en el congreso de Estados Unidos, el Jefe del Comando Central de las Fuerzas Armadas norteamericanas, general John Abizaid, reconoció que el Pentágono está recolectando e interpretando fotos y otros datos de inteligencia sobre las instalaciones iraníes y también está desarrollando sistemas de armamentos para posibles ataques contra objetivos iraníes fortificados y a la vez preparando las condiciones en el terreno para un probable ataque.
En otro de estos juegos, desarrollado en noviembre de 2004, por la revista norteamericana Atlantic Monthly, los exfuncionarios de administraciones anteriores que participaron, llegaron a la conclusión de que el Presidente debería, con mucha paciencia, cambiar el comportamiento del gobierno iraní, cuyos motivos la Casa Blanca no entiende bien, y sobre el cual la influencia es limitada. El Coronel retirado de la Fuerza Aérea, Sam Gardiner, uno de los participantes resumió los resultados de este ejercicio: No tenemos una solución militar para el conflicto con Irán, y tenemos que hacer que la diplomacia funcione.
La revista Newsweek revelaba a finales del 2005 que la CIA y la DIA habían analizado en otro de estos juegos de guerra, las posibles consecuencias de un golpe preventivo contra Irán, pero que los participantes se mostraron disgustados con el resultado de sus elucubraciones, principalmente porque no se había llegado a la conclusión de que podría evitarse la escalada del conflicto. A pesar de esos consejos, todo parece indicar que el Presidente W. Bush insiste en seguir adelante con sus planes agresivos. Después de todo, las mentes de los neocons están calculando que una eventual acción militar limitada quizás pudiera revertirse en votos en las próximas elecciones de medio término en noviembre.
0 comentarios